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Averly no puede desaparecer, la Diputación General de Aragón se hace aval de Averly (Arturo Aliaga, 2010)

Averly no puede desaparecer, la Diputación General de Aragón se hace aval de Averly (Arturo Aliaga, 2010)

El Consejero Arturo Aliaga. Foto Heraldo de Aragón. 

Nota de Prensa

"Averly no puede desaparecer, la Diputación General de Aragón  se hace  aval de Averly",

palabras del Consejero de Industria, Aliaga,  en mayo del 2010 

Ayuntamiento y Diputación General de Aragón están "obligados" con Averly

 

Ante la campaña de imagen que  la promotora Brial-Neurbe  está presentando  en prensa, Apudepa,  se siente en la obligación de mantener informada a la opinión pública con las siguientes manifestaciones y aclaraciones a favor de la empresa Averly S.A. y en particular con Dª Carmen Hauke, "alma de Averly",  y propietaria mayorista de una  empresa que ha sido familiar desde su origen:

Averly, no ha sido, ni es una empresa familiar metalúrgica cualquiera  en el panorama empresarial aragonés dado el carácter cultural  que ha ido  adquiriendo a lo largo de sus más de 150 años de actividad:  investigación aplicada a todo tipo de maquinaria  agrícola, siendo muy reconocidas las turbinas hidráulicas de esta fábrica, por citar algún ejemplo; también es muy alabada su obra de diseño arquitectónico urbano y decorativo, habiendo generado en cualquiera de los casos  un producto de  alta calidad; Averly cuenta en su haber con un repertorio excepcional e  ingente del proceso de elaboración de sus productos; también de un archivo de alto valor industrial y social; siendo, finalmente, una empresa  muy estimada profesional  y académicamente. Averly siempre ha estado receptiva al préstamo de obra para  exposiciones y abierta a visitas   universitarias y centros docentes. Patentes  y condecoraciones han sido fruto de su buen hacer y experiencia, siendo  uno de los últimos recibidos  el de Fundación Basilio Paraíso dependiente de la Cámara de Comercio.

Si la Diputación General de Aragón hubiese cumplido con su palabra y el Ayuntamiento hubiese pagado en plazo su deuda con Averly S.A.,  la fábrica estaría sin duda en otra situación muy diferente y la ciudad no sufriría la merma de este capital cultural. La situación de crisis que ha sufrido esta  metalúrgica tan especial exigía por parte de la Diputación General de Aragón otro trato, tal y como le fue prometido a Dª Carmen Hauke Bea por el Consejero de industria Sr.  Aliaga en mayo del 2010:  Averly no puede desaparecer; la Diputación General de Aragón  saldrá como  aval de Averly.  Nada de esto se cumplió. Ante la apurada situación del caso, el 24 de julio del 2012 la actual presidenta del Gobierno de Aragón, Dª Fernando Rudi, tenía concedida entrevista a  dicha propietaria, quien iba a trasladarle la situación, entrevista que fue anulada por la presidenta el día anterior, encuentro del que nunca más se supo, a pesar de su insistencia en noviembre del ese mismo año, tras salir esta de una prolongada estancia en una clínica. 

 Lo que fue en origen una pequeñísima deuda empresarial ante Bankia,  llevó en pocos meses al precipicio económico representado por una subasta inminente. Los Hauke se vieron abocados a vender los inmuebles, no así los bienes muebles de los que siguen siendo propietarios, al no haber otra salida después de haber finiquitado el despido obligado  de su decena  de empleados. En este duro conflicto  surge la compra "oportuna" de la familia Briceño  que a finales de enero del 2013 hicieron efectiva el pacto con el objetivo de derribar todo y construir en el mismo sitio 200 pisos,  siendo estos aval de lo que en un futuro recibirán como pago de la venta. El dinero recibido por los Hauke sirvió para pagar la deuda generada.

Es preciso decir que la propietaria  ha seguido disfrutando de la fábrica hasta el 10 de enero del 2014, tal y como recoge la prensa, y que sigue viviendo en la casa familiar,  y que hasta diciembre del 2013 todas las naves han estado llena de máquinas, herramientas, plantillas, moldes y modelos, así como un archivo que está ahora, todavía, por trasladarse. Sabido es que desde  abril del 2013 se ha generado un expediente de protección para la fábrica que finalizó con la protección parcial de Averly como Bien Catalogado del Patrimonio Aragonés (BCPCA),  B.O.A del 18 de diciembre del 2013, lo que  ha supuesto la protección del 30%  de la superficie de la  industria, así como la de 132 bienes muebles y el archivo que también son BCPCA, frente al  70 % de la fábrica que la nueva empresa desea derribar.  Otros colectivos, compuesto de  intelectuales, Apudepa y Plataforma Salvemos Averly, por ser  Averly una empresa excepcional y  única en España en su género, han  solicitado que sea declarada Bien de Interés Cultural, recurriendo Apudepa el 22 de enero ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón la Orden publicada del 18 de diciembre.

Mientras tanto, urgidos por la venta y el apremio constante de la propiedad, la antiguos propietarios se han visto en la necesidad de trasladar algo así como 20.000 (veinte mil) piezas que han sido, y están siendo, llevadas a una nave, algunas se han ido a la chatarrería, sin que la Diputacio General de Aragón mediase en este problemático traslado de tan apreciados bienes industriales-.culturales. 

Desde el 11 de enero del 2014 la promotora Neurbe se ha dedicado a desmantelar el mobiliario de ciertas naves de la fábrica a pesar de que ello contraviene el espíritu y la letra de la Licencia Urbanística que está en tramitación y en concreto del artículo 230.2.c. de la Ley Urbanística de Aragón, de ahí las imágenes que estos días se han presentado a la prensa. Apudepa informa que la  sensación de vacío, y de ciertas pérdidas,  no es irremediable. Neurbe tiene ahora  obligación de no demoler nada y de  "repasar y apuntalar  las cubiertas en mal estado de las naves y almacenes de los edificios del recinto que no están incluidos en el ámbito declarada como Bien Catalogado del Patrimonio Cultural Aragonés",  según consta en la  Resolución  del 21 de enero del 2014, enviada a Apudepa por el Servicio de  Inspección Urbanística, estando ya avisada la Diputación General de Aragón del conflicto generado.

Por el bien de la ciudad y de Aragón, es hora que este conflicto se encare de otra manera. Debe alcanzarse un pacto político que reencauce la situación generada sin más costes añadidos. Los bienes catalogados y los demás deben  volver a su lugar de  origen. La creación de una Fundación, con los Hauke, puede ser una salida razonable.  Averly puede seguir elaborando productos dado que la saga familiar de ingenieros de la familia Averly-Bea-Hauke sigue activa en la actualidad. Lo razonable es que la familia pueda volver a producir en el  Paseo María Agustín, con los pactos oportunos,  a la par que se gestiona este espacio de forma educativa, creativa y  sostenible demanera  que también podamos disfrutarlo todos. Por el bien de la ciudad y de Aragón. En Averly hay mucho conocimiento y saber acumulado que  debe mantenerse.

 

Apudepa,  26 de enero del 2014

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