Último acto vandálico: derribo de la pérgola de la rosaleda por el ayuntamiento de Zaragoza.
Pérgola derribada en noviembre del 2011. Parque J.A. Labordeta de Zaragoza. Foto Daniel Marcos
La última guinda del equipo de gobierno del ayuntamiento zaragozano lo ha constituido el derribo de la pérgola de la rosaleda del parque grande, o parque de José Antonio Labordeta. Se trta de un acto vandáñico en toda regla pues el ayuntamiento contraviniendo el plan director del parque ha mandado derribar sin más una sencilla pero encantadora estructura arquitectónica que tenía 70 años, soporte de una rosaleda, lugar romántico de esparcimiento, reposo y descanso de los zaragozanos, espacio de luces y sombras tamizadas entre los parterreres del jardín.
La deriva administrativa está patente en lo que les vamos a contar. Si Vd. visita la página oficial del ayuntamiento de Zaragoza y entra en el apartado la Ciudad, "Vistas de la Ciudad, Zaragoza Monumental", se topará con la foto en grande de la rosaleda que nos ocupa, imagen hermosa de Daniel Marcos. Es decir, que igual les da exhibirla en la vistas monumentales de la ciudad como a continuación derribarla. ¡Aquí no hay quien viva!
Por otro lado, hemos recibido ayer este correo de la Junta Municipal de la Universidad y que dice textualmente: “Se le informa que la Concejala Presidenta de la Junta Municipal Universidad ha solicitado la asistencia de un Técnico Municipal, al Pleno de la Junta que se celebrará, hoy, jueves, a las 19,00 horas, para que explique los motivos del derribo de las pérgolas de la Rosaleda del Parque Grande y los planes de actuación que tiene previsto realizar el Área de Medio Ambiente”.
Desde APUDEPA hemos respondido hoy viernes que “Agradecemos la información y les informamos que APUDEPA se suma a cualquier manifestación oficial de protesta que hubiese desde la Junta Municipal Universidad por tan incívica manera de proceder del consistorio zaragozano”.
En el inri del disparate desde el blog de Apudepa hemos alucinado al leer en Heraldo de hoy que el actual jefe de parques y jardines es José Luis Alonso, antiguo director de la Confederación Hidrográfico del Ebro, conocida como CHE. De tal palo, tal astilla.
Que conste que lo que han derribado ya no se puede recuperar y que su ruina ha sido un gasto absurdo e inútil en un momento de durísima crisis en España.
Esta ciudad sigue enroscada en el ninguneo más absoluto hacia sus ciudadanos. Pero qué falta de sentido común, sensibilidad, respeto y un largo sinfín que no merecen más palabras.
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